
Los ejercicios hipopresivos y sus beneficios para el suelo pélvico
Seguro que ya has oído hablar de los abdominales hipopresivos y de sus efectos beneficiosos para la salud. Estos ejercicios, no solo implican el trabajo de los abdominales, son más allá de una moda, y conllevan una serie de posturas y movimientos que, realizadas de forma correcta, logran tonificar la musculatura abdominal profunda y del periné, además de trabajar el resto del cuerpo en cada una de las posiciones solicitadas.
¿Pero cómo se realizan? ¿Son diferentes a los abdominales tradicionales?
Los abdominales tradicionales son aquellos que implican una flexión del tronco y la cabeza hacia las rodillas, y en general aquéllos que ejercen una hiperpresión sobre los músculos del suelo pélvico, siendo los ejercicios hipopresivos aquellos que, a través de posturas y movimientos, buscan disminuir la presión en las cavidades torácica, abdominal y pélvica.
Para realizar correctamente los hipopresivos es necesario una postura de base, que será diferente según objetivos y nivel del paciente, a la que incorporaremos un movimiento. Tras varias inspiraciones y espiraciones, normalizando la respiración, se suelta todo el aire vaciando los pulmones y se realiza una apertura costal en apnea (como si quisieras realizar una inspiración pero sin tomar aire), sintiendo como el abdomen y el ombligo se mete hacia dentro y el pecho se expande.
Estos ejercicios se realizan en apnea espiratoria, interrumpiendo la respiración tras haber soltado todo el aire que había en los pulmones (espiración) aunque pueden realizarse también sin apnea, contando con los beneficios de la propia postura y la apertura costal. La ventaja de realizarlos en apnea es que se potencian los efectos beneficiosos de los ejercicios hipopresivos.
Los grandes beneficios de los ejercicios hipopresivos o gimnasia hipopresiva se pueden reagrupar en estos 4 grande bloques:
- recuperación postural
- descongestión de la pelvis
- mejora de la capacidad ventilatoria
- tonificación abdominal y del suelo pélvico
destacando la reprogramación de la respuesta muscular ante las situaciones de aumento de presión del día a día, incrementando el tono muscular en reposo y mejorar la respuesta muscular ante los aumentos de presión puntuales (esfuerzo, tos, estornudo…).
Al realizar correctamente los hipopresivos sentiremos como si por dentro te elevasen y estirasen todo el tejido, movilizándose las vísceras, favoreciendo el tránsito intestinal y ayudando a recolocar los órganos internos de la pelvis.
Esta actividad tiene beneficios por tanto en dos grandes áreas: la terapia y el deporte.
En el ámbito terapéutico, están destinados al tratamiento y prevención de diversas patologías funcionales como las digestivas, ginecológicas, urinarias, obstétricas o posturales (incontinencia, dolor lumbar, algias perineales, prolapso….), mientras que en el área deportiva están orientados a mejorar la condición física y la postura, prevenir lesiones, aumentar el rendimiento deportivo, mejorar la condición física, mejora de la capacidad carpio-respiratoria, mejora de la función sexual, reducir el perímetro de la cintura, etc.
Si quieres mejorar tu condición física, complementar tu entrenamiento, prevenir lesiones o tratarlas… la gimnasia hipopresiva puede ser un buen recurso.
Recuerda que siempre debes acudir a profesionales especializados en las áreas de la fisioterapia y la educación física…y sobre todo…que para comenzar a realizar la gimnasia hipopresiva es importante realizar una valoración individual por parte de un especialista del suelo pélvico.
Cristina Salar
Doctora en Fisioterapia
Especialista en Suelo Pélvico, Actividad Física y Salud