A pesar de que actualmente se habla más sobre sexualidad, siguen existiendo muchos tabúes y mitos que es necesario desmontar. La realidad es que la eyaculación precoz es la disfunción sexual más frecuente que se da en el hombre en todas las franjas de edad.
Hay estudios que cifran en más de un 30% los hombres que padecen eyaculación precoz actualmente, mientras que casi el 80% la ha padecido o la padecerá en algún momento de su vida.
Sin embargo, a pesar de su alta incidencia, según datos de la Asociación Española de Andrología, Medicina Sexual y Reproductiva «El 43% de los españoles padecen eyaculación precoz en algún momento de su vida». De éstos sólo un 9% acude al urólogo o andrólogo, y únicamente un 4,2% consultan con un sexólogo para intentar controlar la eyaculación precoz”. Estos bajos porcentajes evidencian que sigue siendo un tema tabú entre los hombres.
Aunque no se conoce con exactitud la causa que la provoca, se trata de un problema que suele aparecer fundamentalmente “en la adolescencia” o al inicio de las relaciones sexuales, sin embargo, en los últimos años se está observando un cambio de tendencia, y son cada vez más los hombres que padecen eyaculación precoz por primera vez en la década de los 40.
Se describe como eyaculación precoz cuando, de una manera persistente, se produce la eyaculación y el orgasmo, antes o inmediatamente posterior a la penetración y siempre en contra de la voluntad del varón.
Para que hablemos de eyaculación precoz, este problema debe aparecer de una manera frecuente, y ocasionar problemas a uno o a ambos miembros de la pareja.
Existen varios tipos de eyaculación  precoz,  entre los que encontramos la eyaculación precoz primaria, cuando este problema se produce desde las primeras relaciones sexuales, y la eyaculación precoz adquirida, cuando aparece tras una vida sexual plena, pero en todos los casos, coinciden en la incapacidad de controlar de forma voluntaria la eyaculación y que es vivida con ansiedad e insatisfacción por uno o ambos miembros de la pareja y este factor causa problemas en su relación sexual tales como la elusión de las relaciones sexuales, pudiendo llegar en algunos casos a cursar con disfunción eréctil, resintiendo la salud sexual y la convivencia de la pareja.
Aunque a día de hoy siguen siendo los tratamientos farmacológicos los que más prevalencia tienen destacándose el uso de anestésicos tópicos e inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina orales, la tasa de abandono es muy alta por los efectos secundarios de los mismos.
Por estos motivos, son muchas las investigaciones que actualmente se están focalizando en mostrar la eficacia de llevar a cabo un programa de ejercicio físico dirigido por fisioterapeutas especializados en combinación con el abordaje psicológico con o sin ayuda de diferentes dispositivos o juguete sexuales, rompiendo los paradigmas clásicos y siendo una alternativa a los tratamientos farmacológicos.
De este modo, tanto desde la fisioterapia como desde la psicología es necesario trabajar de forma coordinada. La normalización del tono de la musculatura del suelo pélvico sin tensiones mediante un programa de ejercicios determinados por un fisioterapeuta y adaptado a cada paciente, un abordaje psicológico por parte del sexólogo, y la posibilidad de utilizar dispositivos que simulan la cavidad vaginal (presión, temperatura, …) está demostrando un alto índice de éxito.
Porque la eyaculación precoz es un problema que tiene solución y es mucho más sencillo de lo que muchas parejas piensan… No lo dudes y consulta a tu sexólogo o fisioterapeuta especializado en suelo pélvico.
Cristina Orts Ruíz
Doctora en Fisioterapia
Especialista en Suelo Pélvico